El PSOE consiguió ayer el respaldo de Podemos, PNV y UPN y la abstención de Ciudadanos en el Pleno del Congreso para la tramitación de una proposición de ley que busca obligar a las empresas a llevar un registro con las horas trabajadas por cada empleado, lo que en suma, supondrá el afloramiento de horas extra y el encarecimiento de la jornada para el empresario, además de otros costes administrativos.
La proposición de ley prevé reformar el Estatuto de los Trabajadores para obligar al empresario a registrar la jornada diariamente, después de que una sentencia del Tribunal Supremo de marzo que libró a Bankia de llevar el control horario instó al legislador a aclarar esta cuestión, que el ordenamiento jurídico laboral no prevé y que afecta a empresas de todos los sectores, aunque se ha producido más conflictividad en la banca.