La pugna entre Hacienda y Airbnb por los datos fiscales de los clientes tiene visos de tener los días contados. La compañía con sede en San Francisco ha enviado a sus clientes de todo el mundo una notificación en la que informa sobre la actualización de su política de servicios, de pago de los servicios y de privacidad.
La nueva versión de las dos primeras entrará en vigor el próximo 27 de junio para todos los clientes, tanto antiguos como nuevos, mientras que las nuevas condiciones de privacidad se actualizarán el próximo 25 de mayo.
Y es en este último apartado donde reside la principal novedad en la política de la compañía, que se pliega en España a los requisitos de Hacienda. La empresa se había negado a aportar datos de sus clientes, salvo mandato judicial, pero a partir del 25 de mayo sí lo hará. En el punto 3.9 de las nuevas condiciones de privacidad, la compañía establece que los anfitriones y huéspedes, cuando así lo autorice la legislación aplicable, “nos otorgan autorización de manera expresa, sin mediar notificación adicional, para divulgar datos de los anfitriones y huéspedes y demás información relativa a ambos o a sus transacciones, reservas, alojamientos e impuestos sobre el alojamiento a las agencias tributarias pertinentes, incluidos, entre otros datos, el nombre del anfitrión o del huésped, las direcciones del anuncio, fechas e importes de transacciones, NIF/CIF e información de contacto, así como el importe de impuestos que los anfitriones hayan recibido de los huéspedes (o que estos adeuden a los primeros)”.
Fuente: Cinco Días.